Muchas veces la felicidad llama a nuestra puerta y no la sabemos reconocer.
La felicidad consiste no en la alegría ni en tener todos los sueños y deseos cumplidos, la alegría excesiva puede rallar en el estado maniáco cuando se hace contigo la alegría moderada es mas real en este mundo en el cual vivimos.
Los deseos no cumplidos son solo deseos o proyecciones de nuestra mente por agarrar algo que suponemos nos va ha hacer felices, mejores, atractivos, libres..........pero en tanto en tanto la felicidad la estamos siempre viendo fuera de nosotros mismos como algo que buscar que conseguir en lo material, en el agarre, en el enganche.
Depues de muchos años de trabajar con enfermos mentales me he planteado muchas veces el porque de la enfermedad mental, no desde un estudio ciéntifico sino desde la experiencia, y he llegado a la conclusión de que el ser humano tan absorbido por la vida estresante que muchas veces el mismo consiente ha dejado de verse en su parcela personal lo que desde el punto de vista espiritual sería verse en el interior.
Yo definiría este estado como de desarraigo con uno mismo. Es como haberse separado tanto de uno mismo que en la lejanía se pierde la concepción de la persona que uno es y entramos de lleno en el mundo de las parnoias, delirios y estados psicóticos unas veces placenteros y otras no tanto pero siempre percibiendo la vida desde fuera y nunca desde dentro.
El yo ese eterno desconocido y tan fácil de encontrar cuando se vive en la búsqueda de verse.
Muchas son las personas que asisten a cursos de psicoterapias, psiquiatras, psicólogos, cursos de diferentes temas, basados en la espiritualidad y la psicología pero en el trayecto de sus vidas cuando han creido que por saber ya estaban en el camino correcto se encuentran frente a grandes problemas d en los que no hay vuelta a trás y no saben como enfocar el sufrimiento, yo conozco algunos que la vida les ha desestructurado sus creencias basadas en filosofias como fluir, aceptar, dejar que la vida y el universo me envien lo positivo que yo le envio, pero no es asi, la vida trae lo que trae .Y lo que trae ni es positivo ni es negativo
en principio y hablo desde mi experiencia de vida, en mi persona lo primero es comprender.
Comprender lo que me pasa de donde viene sin tapaderas, al desnudo, sin fantasias, con realidad y ver y ser consciente de todo el bagaje que tengo con sinceridad y con cariño sin juzgarme.
Lo segundo es querer cambiarlo o trabajarlo y lo tercero es poder.
Cuando digo poder me refiero a tener suficiente fuerza y claridad para romper moldes estereotipados que he aprendido de mi familia mi cuiudad en donde vivo, mi educación, mis contactos con el mundo, amigos, profesores etc y poder hacer con toda esta amalgama una persona diferente una persona consciente.
ser consciente no es ser pensante este sería otro tema por hoy y para finalizar os digo que la felicidad llama pero no como tu esperas por eso enfrascado en tus creencias de lo externo no oyes esa llamada que ya está en ti.
Maria Teresa Miralles
diplomada en enfermería
Especialista en Salud Mental